Se refiere a la medición de la presión intraocular (IOP) y es una técnica indispensable en la exploración oftalmológica rutinaria. Clínicamente se lleva a cabo de forma no invasiva mediante la valoración indirecta de la tensión o rigidez ocular, concretamente corneal. Debe realizarse siempre antes de la instilación de agentes midriáticos, y evitando y teniendo en cuenta cualquier factor no ocular que pueda alterarla (p.ej. presión yugular, jadeo, retracción palpebral excesiva, etc.). Por lo tanto, el valor numérico obtenido no es diagnóstico per se y su interpretación debe hacerse siempre teniendo en cuenta el resto de signos clínicos.
Entre los tipos de tonometría más utilizados encontramos: (1) de aplanación y (2) de rebote. Mientras la de aplanación (p.ej. TonoPen Vet® y TonoPen Avia Vet®) requiere calibración diaria y anestesia tópica, la de rebote (p.ej. TonoVet® y Tono Vet Plus®) posee calibración especie-específica y no necesita anestesia tópica.
El rango de IOP fisiológico en la mayoría de especies es 15-25 mmHg (perro 15–18 mmHg [hasta 25], gato 17–19 mmHg [hasta 27], conejo 15–20 mmHg y caballo 17–28 mmHg. Sin embargo, existen una variación circadiana de aprox. 2-5 mmHg, siendo más alta a primera hora de la mañana en perros y por la noche en gatos, y de mayor calibre en pacientes con glaucoma. Es fundamental su medición bilateral y una diferencia de igual o más de 5-8 mmHg entre ojos será sugestiva de alteración.