La primera consulta oncológica es un proceso complicado en donde los tutores siempre están comprometidos desde el punto de vista emocional, con muchas dudas y miedos y con muchas preguntas en la cabeza como ¿tiene curación esta enfermedad?, ¿Cuánto va a vivir? ¿Cómo va a vivir? Y con una gran certeza inamovible, “no quiero que sufra en ningún momento”. Para poder abordar esta consulta con éxito se requiere por nuestra parte un conocimiento absoluto sobre la enfermedad oncológica que vamos a tratar, para poder responder a preguntas como cuál es el diagnóstico definitivo de este paciente, cuál es el estadio clínico de la enfermedad, porque con esto vamos a poder responder a tengo opciones reales de curar a este paciente, cuáles son las opciones terapéuticas disponibles, cuál es el pronóstico y efectos secundarios para cada una de las opciones terapéuticas disponibles.